Mis queridas guachitas, después
de un receso necesario hemos vuelto hoy para hablarles de la “dieta”. Odio la
dieta, Odio a la persona que se le ocurrió la palabra dieta porque es fea: ya
sea cuando uno la lee o cuando se escucha.
Estoy estresada de pensar que en
dos semanas más debo ir a mi prueba de vestido y que me quede horrible por
culpa de los queques de mi abuelita. Ok, nadie me obligó a comerlos, pero
cuando en Santiago casi nunca los veía, allá los tenía todos los días, a toda
hora y al alcance de mi mano. Además, las vacaciones son vacaciones, no me
desbandé ni nada, pero pucha que disfrute comer la comida de mi abuela. Estaba en
Conce y tenía que comer no más, eso es ley.
Cuando volví a Santiago, empezó
marzo y llegó el lunes, me dije: Comeré moderadamente poco, cero pan o bebida y
hacer mucho ejercicios. He cumplido hasta ahora mis guachitas (abrazos y
aplausos para mi) pero comienza otra semana y me da una crisis imaginativa, o
sea pasarme el rollo todo el rato: Yo, en mi hermoso vestido de novia, llenita
de los ricos queques de mi abuela y con un horrible cierre que no quiere subir porque odia el
amor de mi abuela y sus queques.
El reordenamiento (por no decir dieta)
post vacaciones es complejo. Es fácil
decir guachitas: OK, tomo agua, hago ejercicios y como saludable… el lunes.
Pero es difícil luchar con los postres y el queque que mi abuela me mandó. Y
más todavía es el ejercicio ¿En qué momento? Voy en mi segunda semana de
trabajo y ya estoy raja. Mi pobre caño me mira con cara de: estoy aquí
acércate, súbete y suda.
Mis guachitas, no me quejo más,
pero si les quiero proponer algo, hagamos una campaña de amiga buena onda. Si
alguna de nosotras ve a otra guachita carnuda en la lucha del reordenamiento,
ayúdela, sea buena guachita samaritana y no pida el postre más goloso del
casino, quiosco o negocio, sino que pida la fruta y acompañe a la guachita en
apuros. Es lindo cuando una compañera del trabajo o amiga te dice: te acompaño,
también comeré ensalada. O tu pareja, que te diga: sí mi amor, las galletas de
agua con mermelada también son ricas para la once.
Entonces mis guachitas, por un Reordenamiento y no en dieta, todas seamos
unas #GuachitasCarnudasSalvavidas
para nuestras amigas, compañeras, madres, hermanas, pololos, tías, conocidas,
etc. Cuéntenos ¿Cómo se reordenan después del verano sin polera?
Reina M
creo que empezare a reordenarme el lunes..... pero realmente aún no decido cual lunes del mes... quizas del próximo mes.... en fin.... ese día llegara, por el momento disfruto ser una guachita carnuda!!!!
ResponderEliminarCualquier lunes está, lo importante Guachita es que tu sientas que está bien!
EliminarMi excusa es, entrando a trabajar, quemaré calorías, llevo meses sin trabajo y las calorías se acumular y se acumulan, tendré que ponerle bueno al trote o al amor, que tan bien hace. Felicidades por ese paso a ser la señora de... y te verás igual de maravillosa con ese vestido, aun cuando pasees esos kilitos de mas.
ResponderEliminarEl trabajo llegará, no pierdas las esperanzas y si quieres ponerte al día con el ejercicio, el amor quema muchas calorías, así que póngale weno todos los días. Un abrazo Guachita Anónima!
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